juandejuan escribió: ↑06 Feb 2021, 17:00
Eugene The Jeep escribió: ↑06 Feb 2021, 15:00
Desinfectantes
– Alcohol - agua oxigenada - Povidona yodada
Perdona @Eugene The Jeep , no sabia que betadine era un nombre comercial. Mi ignorancia en el campo de la medicina (y en otros muchos) es grande, además de darme mucha "grima" es algo que tengo "subcontratado" a mi pareja. Suerte tienes que no te he puesto que añadas mercromina
Nada hombre, es normal, con tanto nombre comercial y composición, a veces nos liamos un poco. Es algo parecido a cuando nos referimos a un yogur como danone, cuando en realidad este último es una marca de yogures, optando por darle al producto el nombre de la marca que más nos suena o conocemos.
Indudablemente, ni todo el mundo es sanitario, ni tiene porque saber o gustarle el tema. Por eso, pido disculpas, si a la hora de exponer algo, pudiera parecer que se más que nadie, nada más lejos de la realidad, y solo pretendo ayudar en lo posible a todo aquel que esté interesado.
Pero me viene muy bien y te agracezco compañero
@juandejuan que saques a relucir esto y que nos recuerdes lo de la mercromina o mercurio cromo. Esta solución antiséptica, que tantos recuerdos me trae de niño, que nos dejaba teñidos de rojo, y que tanto se ha utilizado en España desde 1935. Dejó hace mucho tiempo de usarse, pues aunque es un producto mercurial, que contiene mercurocromo, está considerado un bacteriostático de baja potencia, es decir, no produce la muerte de la bacteria sino que impide que esta se reproduzca. En realidad, con la mercromina la bacteria envejece pero es casi inactivo frente a esporas, virus y micobacterias. Este antiséptico se inactiva en presencia de materia orgánica, como la que puede haber en una herida y, en ocasiones, puede producir dermatitis de contacto y sensibilidad sobre la piel.
Hasta hace unos años se ha usado como antiséptico de heridas y para curar el cordón umbilical, pero en el medio sanitario sobre todo, aunque también en el ámbito doméstico, ha sido suplantada por otros antisépticos. Uno de los más eficaces es la clorhexidina que se vende con el nombre comercial de Cristalmina. Es quizás la más utilizada y recomendable para heridas abiertas porque tiene una baja toxicidad para la piel (aunque no para la boca y ojos). Se trata de un antiséptico tópico con efecto muy rápido y una mínima absorción (solo se han asociado algunas reacciones alérgicas a su tratamiento tópico). Tiene efecto bactericida contra microorganismos como estreptococos, estafilococos, E. coli, salmonellas y bacterias anaeróbicas.
Otra solución antiséptica ya mencionada, es la povidona yodada como Betadine. El yodo que se usa es una solución de povidona yodada al 10%. Este antiséptico es de uso tópico y de amplio espectro de actividad. Es activo frente a bacterias, hongos, virus, protozoos y esporas. Libera lentamente yodo orgánico, que es el que posee la actividad bactericida. A mi personalmente me gusta más el betadine, aunque en el Centro de Salud, solemos usar ambos. Tiene actividad microbicida en presencia de sangre, pus, etc., y ayuda en el proceso de cicatrización de un gran número de heridas. No deben mezclarse varios antisépticos a la vez porque podrían interaccionar entre sí y esto dificultaría la curación de la herida o, en ocasiones, provocar irritaciones y o algún problema en la piel.
En cambio, el alcohol etílico o alcohol de 96º, el que suele tenerse en casi todas las casas, no debería usarse para curar una herida abierta porque no ejerce efecto en materia orgánica, es decir, en sangre o pus y, además, escuece y causa sequedad en la piel. Su actividad bactericida, en cambio, sí es eficaz para desinfectar la piel antes de una inyección o una vacuna, por ejemplo, y para limpiar y desinfectar las manos o la piel sana. En todo caso se debería de usar el de 70º como ya se indicó anteriormente.
Tampoco es aconsejable usar agua oxigenada (peróxido de hidrógeno) como antiséptico porque puede obstaculizar la curación de la herida e irritar la piel. Es poco potente porque las catalasas (enzimas) de los tejidos vivos la inactivan. Como antiséptico suele usarse para limpiar heridas muy sucias, por su acción sobre los anaerobios, aunque nunca debe usarse en cavidades cerradas ya que puede ser peligroso porque libera oxígeno. Sí es efectiva, en cambio, como desinfectante de superficies o para taponar una hemorragia nasal, es un excelente desinfectante.
Hala, ya os he vuelto a dar la brasa, si es que estos temas me encienden y me apasionan.
